En Pequeña Mole hemos dedicado este último año a pensar el diseño desde la mirada del movimiento libre; nos propusimos crear una línea de productos para generar entornos propicios para el desarrollo motriz autónomo, y acompañando su lanzamiento queremos contarles de qué se trata…
Estamos seguras de que muchas y muchos de ustedes lo conocen y hasta sabemos que hay especialistas dentro de nuestra pequeña gran comunidad, ¡así que este post es una síntesis y una invitación a compartir pensamientos sobre este interés maravilloso que nos une!
Pikler propone más que un método,
una manera diferente de mirar al bebé y al niñ*;
donde el adulto esté en un lugar de igualdad y respeto
hacia l*s pequeñ*s y la confianza en sus capacidades.
La Dra. Emmi Pikler fue una pediatra nacida en Viena en 1902; se dedicó a investigar el proceso de desarrollo motor de l*s bebés y niñ*s. Estaba convencida de que el desarrollo motor se da adecuadamente de forma espontánea, y que para que esto suceda son esenciales las condiciones físicas y emocionales del entorno de vida de los niños. Aplicó en la práctica sus concepciones sobre no acelerar el desarrollo, respetar el ritmo natural, confiar en las iniciativas propias del niño facilitando el movimiento y la actividad autónoma.
Su visión se centra en cuatro aspectos fundamentales: Respeto, Libertad, Comunicación y Estabilidad
Identifica como necesidades fundamentales al apego y la autonomía. Para Pikler, el bebé es un ser capaz de desarrollarse de manera autónoma y para esto necesita un entorno seguro, con vínculos afectivos estables y seguridad física.
Plantea la importancia de crear una estructura de apego afectivo estable que se basa en el respeto a l*s pequeñ*s, a sus ritmos y necesidades. Para conseguirlo, es importante hablar con l*s bebés y los niñ*s, anticiparles en todo momento todo lo que vamos a hacer con ell*s y esperar a que estén preparad*s para hacerlo. Por ejemplo cuando vayamos a lavarles podemos ir explicándoles que les vamos a enjabonar, luego que les vamos echar agua, etc. Les vamos diciendo lo que vamos a hacer de manera dulce, sensible y respetuosa; observando y aprendiendo a conocer sus respuestas sabremos cuándo intervenir y cuándo dejarles actuar libremente.
Defiende que se deje a l*s bebés moverse libremente, que no se les coloque en ninguna posición a la que no puedan llegar por ell*s mism*s. El niñ* va adquiriendo una mayor autonomía y desarrolla una mayor movilidad postural, llegando a aprender a sentarse y caminar sin necesidad de ayuda y sin que el adulto tenga que incitarle a ello ni imponerle ningún hito en su desarrollo.
A la hora de organizar un entorno propicio para el desarrollo en movimiento libre se considera la actitud y rol de las personas adultas, las características del espacio, los objetos que se ponen a disposición y la indumentaria. La idea principal: que tanto la actitud de quien cuida como el ambiente físico estén orientados a permitir el movimiento libre, atendiendo que nada ponga en riesgo la salud física ni mental del bebé.
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Si quieren profundizar sobre los fundamentos del movimiento libre recomendamos las siguientes fuentes:
https://www.piklerloczy.org/es/documentacion
